Reflexiones
Hace unos días iba caminando a mi cita de acupuntura al bajarme del tren tengo que caminar unos 15 minutos, tiempo suficiente para que mi mente comience a reflexionar, allí llego este pensamiento, no solo un pensamiento sino también la sensación de mi cuerpo al erizarse, pensé en Jesucristo, en su vida, en todo lo que hizo, en lo valiente que fue y en la forma en que murió.
Comencé a debatir este tema en mi cabeza, cada quien tiene su forma de percibir los mensajes, cada quien los hace propios y ¿si esto es lo que ha pasado con la iglesia? ¿Si la iglesia tomó o comprendió lo que debía en ese momento? ¿Incluso si eso era lo que le interesaba? ¿Por qué solo los católicos conocen la verdad? ¿Y si las demás religiones también están en lo cierto? ¿Cuántos cielos existen, uno para cada religión? ¿Si yo quisiera comprender la vida de Jesucristo a mi manera estaría pecando?
Jesucristo me inspira y siempre me pregunto ¿cómo fue su vida antes de la época de la crucifixión? ¿Por qué en las iglesias solo lo vemos sufriendo? ¿Por qué no nos muestran lo feliz que fue? ¿Todo lo que logro? ¿Por qué nos imponen tantas reglas atemorizándonos con castigos, con juicios finales, con el cielo y el infierno?
Jesucristo al igual que Buda Siddhartha por mencionar a dos seres iluminados y que son para mí los más conocidos, fueron seres humanos, de carne y hueso, no fueron unas deidades que se aparecían en el cielo, fueron personas como nosotros que desarrollaron la conciencia suprema, llegaron a la expresión más alta de su ser, seres humanos que creyeron fielmente en su corazón, que hicieron lo que estaba indicado en su camino de vida, seres que desarrollaron la máxima expresión del amor, que lograron su conexión con Dios, su conexión divina, seres que nos dejaron muchos aprendizajes y miles de herramientas para desarrollar nuestro propio potencial.
Desde la época de Jesucristo hasta la nuestra, la humanidad no ha cambiado mucho continuamos juzgando, tildando de loco a mucha gente, no creemos y muchos de los que comenzamos a creer sentimos miedo de expresarlo, miedo a ser juzgados o dicho de otra forma crucificados y es que nos cuesta aceptar que somos capaces de lograr todo lo que nos propongamos, somos los creadores de nuestras vidas, poseemos un potencial enorme que no conocemos, que nadie nos enseña, tener fe es una de las más poderosas herramientas, creer en lo que no se ve, creer y desarrollar cada día mas nuestra intuición, escuchar nuestra propia divinidad, vivir desde el amor, creer en Dios en esa fuerza suprema que tiene un rayito de luz en cada uno de nosotros.
Si comenzamos a creer solo un poquito en esa magia que vive en nosotros en esa capacidad, ese don con el cual todos nacemos de crear nuestras vidas el mundo sería otro, sin embargo para cambiar el mundo solo debemos comenzar por nosotros mismos, así que comienza a creer, a crear, a visualizar, a tener fe y tu mundo será ese que tanto deseas. Vivir, vivir, vivir con muchísimo amor, amor propio!
Feliz semana para todos