De vuelta

Ya comienzo a entrar en calor, aunque el invierno sigue presente, comienzo a reconocer mis nuevos espacios, mi calma está llegando, comienzo a estabilizarme, se forjan nuevas zonas de confort, mi espíritu comienza a pedirme a gritos que retome mis hábitos de meditación, mi cuerpo quiere sentirse de nuevo en armonía y yo ya quiero silenciar mis pensamientos.

Este año comenzó con muchísimas emociones: felicidad, tristeza, incertidumbre, dudas, alegrías, miedos, acompañadas de grandes cambios, he vívido un torrencial de emociones, me he separado de mis hábitos de meditación, no tenía cabeza para escribir, hace dos días comencé a meditar, hoy finalmente retome el lápiz.
Me mudé dos veces en casi un mes, quien se ha mudado conoce el estrés, el trabajo que eso implica, no puedo quejarme porque recibí y recibo aún la ayuda de muchísimas personas, que sin pedírselo han querido colaborar con nosotros, por lo que estoy sumamente agradecida con ellos y con la Vida.

Paralelamente fue como mudar mi ser, umnn como explicarlo! Tuve que hacer prueba de muchísima paciencia, ser tolerante, reforzar mis pensamientos positivos diciéndome: tranquila todo esto va pasar, recuerda que nada es eterno, me moleste muchas veces, muchas veces me tuve que reconciliar conmigo, pero siempre estuve muy cercana a Dios, confiando en que todo se iba a solucionar, que la calma llegaría en su momento preciso, que un día como hoy estaría tranquila y Serena en un rincón de mi cama escribiendo estas letras.
Sin saber por donde comenzar entre tanto desorden, las cosas se fueron dando solas, poco a poco, todo fue tomando su ritmo, todo se fue armonizando, es que así es la vida tiene un curso, tiene una fluidez, tiene un andar que nadie puede prohibirle, muchas veces por testarudos, queriendo ir en contra de ese flujo, actuamos como una interferencia, retrasando todo aquello que de un momento a otro nos llegará.

Para este año decidí aceptar la fluidez con que el agua corre, decidí aceptar el curso de la vida, decidí que en mi vida todo fluirá armoniosamente, todo me llegará naturalmente, la lucha la dejo en los años pasados, me propongo sentir la vibración de todo aquello que deseo, sintonizar con esa vibración para obtenerlo por la gracia divina, porque somos parte de un todo, un todo que está interconectado.

¿De donde vengo y a donde voy? Son algunas de mis preguntas frecuentes, no he consigo las respuestas mas convincentes, pero continuo buscándolas, el que busca debe estar dispuesto a encontrar, a recibir, a escuchar, a observar…. Finalmente el que busca debe sentirse vacío para poder llenarse cada vez que encuentre, en esa medida del vaso ¿Como te encuentras tú?

Comienza a vaciarte, a liberarte de prejuicios, ideas, conductas, pensamientos, hábitos, que te impiden encontrarte. Felizzzz miercoles para todos.