Mi cumple Vida!
Los recuerdos llegaron a mi memoria como una serie de fotografías, me vi a los 9 años prendiendo velitas y pidiéndole a los santos, me vi en el patio corriendo entre los árboles y mojándome con la lluvia, rodeada de primos y tan llena de amor, recordé cuando por primera vez tomé el volante de un carro en las piernas de mi papá, las tardes de disfrute, de sol y de amistades en el polideportivo, en el liceo con los amigos, recordé la sensación en mi estómago cuando me sorprendí enamorada de Renato, recordé momentos en familia, mi camino por la universidad, mi pedida de mano, mi matrimonio, los viajes, la salida del país y todo lo que he recorrido en estos últimos 5 años.
Mientras escribo mi corazón está tranquilo, creo que estoy recibiendo mis 32 con mucha paz, este año que recién termina fue de un crecimiento intenso y a su vez acelerado, fue una búsqueda interna, me sumergí en mis profundidades y entre tanta oscuridad buscaba mi propia luz, mi verdadera luz, hubo muchas lágrimas para ese entonces, mucha guerra entre mi corazón y mi mente, mucho debate, muchos juicios, muchas decisiones.
Allá en mis profundidades me conseguí con mi mayor obstáculo, con el enemigo que no conocía, me conseguí con esa parte de mí que no aceptaba, que no se rendía y que tantas veces me juzgaba, me encontré con esa parte de mi ego que no quería dar marcha atrás o mejor dicho esa parte que quería avanzar, sin perdonar, sin abrazar, sin amar a la nueva versión que estaba ganando terreno dentro de mí, lo entiendo no es fácil dejar y entregar el poder con amor.
En medio de esa crisis existencial en búsqueda de una nueva identidad me conseguí con mi luz, la luz que siempre ha estado, que ya no veía entre tanta cotidianidad, me encontré con lo más sublime que puede existir dentro de cada uno de nosotros, me encontré con mi niñita espiritual.
Con tanto amor y mucha dulzura me acariciaba cuando no quería ver lo que parecía tan evidente, sé que también me abrazaba en las noches que parecían no terminar, hasta que un día por fin levante la mirada y en sus ojos me vi reflejada, me extendió su mano y caminamos, me llevo a un bosque hermoso, me pidió que respirara que viera, que observara el universo maravilloso que se me había entregado, mientras caminaba me encontré en una encrucijada, le rogué que me ayudara que me explicara qué camino debía tomar, cual me llevaba hasta mi verdad y ella con muchísima bondad me dijo: los caminos son solo lo que ves, el inicio, el principio, un primer paso, cualquier camino que decidas tomar te llevara a tu felicidad si en cada paso decides respirar, si en cada paso decides observar, si olvidas cual será el final, si vives al andar, no te angusties, no hay un camino nada más, puedes entrar, caminar, recorrerlo y regresar, puedes saltar entre uno y otro, no hay nada fijo en esta humanidad, se flexible en la vida y todo lo que deseas lo obtendrás.
Desde allí volví a brillar, volví a sonreír desde mi espíritu sabiendo la verdad, que la verdad no existe, que todo el camino se construye en nuestro andar, que poco importa el final si el recorrido sabes apreciar, que soy capaz de todo y de nada si decido o no caminar, que un primer paso comienza a dibujar el sendero que decidas con tu entusiasmo dibujar.
Ella me enseño a escuchar los susurros que me dice sin parar, me acompaña a todas partes con su luz y serenidad, vamos de la mano jugando a vivir, hoy somos 3 componentes que intentamos vivir en armonía, alineándonos con nuestra verdad, mi alma/mi corazón, mi ego/mente y mis actos/acciones.
Gracias a todos los que formaron parte de mi vida y de mi crecimiento espiritual, fueron grandes lecciones y un capitulo que hoy llegó a su final, me abro a las nuevas líneas, con amor, con perdón, con receptividad, con asombro y alegría ante todos los regalos que la vida me aportará, decido recibir lo que por derecho me corresponde amor infinito, magia, abundancia y muchísima felicidad porque YO SOY la máxima opulencia que habita en este cuerpo terrenal.
Mucha vida para mí y para ustedes que me leen ?