El Camino. Castillo Neuschwanstein
Con solo observar la subida comenzaba agotarme así emprendimos nuestra caminata, a medida que iba montando mi corazón se aceleraba de cansancio, mi respiración se hizo consciente solo pensaba en inhalar y exhalar con cada paso un respiro, poco a poco se fueron regulando mis latidos, si hablaba me cansaba nuevamente, si miraba hacia adelante el trayecto que faltaba me…